Sabía usted que Jacinto Jijón y Caamaño fue uno de los máximos proveedores de las colecciones arqueológicas que constituyen el tesoro de la identidad nacional; o qué hubo un tiempo en el cual, el Banco Central del Ecuador llegó a fundir lingotes de oro para respaldar la moneda. Estos y otros datos de interés sobre la historia de nuestro país, los puede descubrir en un recorrido que le dejará impactado de tanta historia, cultura y arte, en el Museo Nacional o MuNa, situado en el edificio sede de La Casa De La Cultura Ecuatoriana, en la zona de La Mariscal, en Quito.
Desde su reapertura en mayo de 2018, este centro presenta una nueva conceptualización, dejando en segundo plano el aspecto cronológico de sus exposiciones y centrándose en la contextualización de los hechos. “El museo ahora es temático, trabajando desde dos ejes, el primero es el Poder Político y Organización Social; y el segundo, Territorio Economía y Trabajo”, manifestó la guía Mabel Espinoza.
El cambio se nota de entrada, pues la primera sala, llamada Del Coleccionismo, explica de qué forma fueron conseguidas las piezas que ahora son el inestimable legado dejado por el Banco Central, de cuando era el promotor de la conciencia museográfica local.
Entre alrededor de 6mil artículos de valor histórico, usted podrá apreciar magníficas vasijas de la cultura oriental Upano, que datan del 600 DC, el sol de oro, atribuido a la cultura Tolita y que sirvió como ícono del Banco Central, pinturas originales de la época colonial, las Venus de Valdivia y la silla en forma de “U” de la cultura Manteña, adornos en barro, cobre y plata, además de objetos a base de concha spondylus, joyas en esmeraldas y otras piedras preciosas, a más de documentos textuales y audiovisuales que dan cuenta de los procesos de cambio de la Nación.
Un detalle importante, es el que usted podrá observar elementos que se muestran por primera vez al público, encontrándose antes en la reserva del Ministerio de Cultura y de Patrimonio. Si bien los ejes temáticos son permanentes, los bienes son cambiados cada cierto tiempo, debido a que no se puede exhibir todo al mismo tiempo. Además, vale mencionar que se tienen exposiciones temporales previstas a alternarse tres veces al año.
La subsecretaria de Memoria Social y directora ejecutiva de MuNa, Ivette Cely, nos comentó que se requirió de un año aproximadamente para la conceptualización, la elaboración de la propuesta, la estructuración de guiones y más de detalles para la reapertura. Según Celi, la reserva de bienes nacionales que tiene sus depósitos en Quito, Guayaquil y Cuenca, posee en inventario más de 650mil piezas. Estas alimentan la exposición de los 16 museos que maneja el Ministerio de Cultura y otros requerimientos curatoriales de museos que no son del Estado, siendo MuNa el mayor repositorio en la actualidad.
Con el recuento hecho, solo queda decirle que destine al menos medio día para que pueda disfrutar de la visita, porque hay tanto que ver y aprender, en medio de fascinantes salas llenas de tesoros de la identidad ecuatoriana.
PARA SABER
- El museo se encuentra en el edificio de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, en la Avenida Patria y Seis de Diciembre y su horario de atención es de 09:00 a 18:00, de martes a domingo, a excepción de los días de feriado nacional. El ingreso es gratuito. Más información en su página Web
- El MuNa está a cargo de la Subsecretaría Técnica de Memoria Social del Ministerio de Cultura y Patrimonio del Ecuador. Sus instalaciones se prestan para la inclusión en su accesibilidad, con la adecuación de rampas y sillas de rueda en la entrada.
- Si bien, en la actualidad las piezas están expuestas a la cercanía de los visitantes, hay que tener mucho cuidado de no tocarlas, a fin de evitar el contacto con el sudor de las manos, lo que podría con el tiempo causar daño en su estructura.
- El local abrió sus puertas después de tres años de haber estado cerrado, lo hizo el 18 de mayo de 2018. Ahora, además de contar con el asesoramiento de expertos en los recorridos, el visitante puede hacerlo con la ayuda de un audio guía que debe ser bajado mediante aplicación en Internet.