En Hostería Paraíso pasarlo bien está garantizado. Como su nombre lo realza, aquí usted se sentirá mimado por la naturaleza y el confort de este centro turístico de Vilcabamba. El entorno es hermoso, pero al ingresar la atención está al 100% en los jardines floridos, la piscina, una gran pirámide y las cabañas.
Hostería Paraíso está ubicada a un kilómetro del centro de Vilcabamba, parroquia ubicada a 40 kilómetros de Loja, en el sur de Ecuador. Vilcabamba es un término kichwa que significa Valle Sagrado y su territorio es conocido mundialmente como El Valle de la Longevidad o de la Eterna Juventud.
La razón es que aquí viven adultos de más de 100 años, con un buen estado de salud y sus facultades cognitivas intactas. Todo esto gracias a su clima subtropical, sin cambios bruscos de temperatura, y a su altitud de 1700 metros sobre el nivel del mar. ¡Imagínese este privilegio que tiene Hostería Paraíso y usted al hospedarse aquí!.
Casi siempre, Jacqueline Carrión da la bienvenida al visitante en su hostería. Pero como huésped se sorprenderá con la atención que reciba de todo el personal: amable, cálido, preparado y complaciente. Están atentos para que su estadía sea mágica, agradable y satisfactoria.
En la recepción, durante el check-in, puede escoger entre las más de 15 cabañas, la que mejor impacte a sus ojos. Todas están rodeadas de árboles frutales y jardines de plantas ornamentales, que son cuidadas con cariño y donde revoletean aves y mariposas. Las pinturas artísticas recreadas de la vida de Vilcabamba en las paredes de las cabañas y las hamacas invitan a descansar.
Al interior todos los elementos garantizan una ambientación excelente. Cómodas habitaciones estándar o matrimoniales, equipadas con tv y wifi, para un descanso placentero. Disfrute de una siesta o continúe con la lectura de su libro desde la hamaca, rodeada de jardines.
Aquí el mundo se ve luminoso. Los huéspedes se sienten más vivos, en paz, dispuestos a disfrutar de nuevas experiencias y enamorarse de lo desconocido. Es el espacio exacto para contemplar, reflexionar, escuchar los sonidos del hábitat, saborear, palpar texturas, respirar aire fresco, relajarse y disfrutar de la belleza de la vida.
Como servicios claves está la piscina al aire libre, cuyas aguas cristalinas bajan desde una cascada artificial para un baño refrescante. También hay un hidromasaje para adultos y otro para niños, sauna y baño de vapor que favorecen para la relajación y la salud.
En el entorno hay juegos infantiles para niños, un amplio espacio para el parqueo de vehículos y está permitido en ingreso de mascotas. La recepción está abierta las 24 horas para atender cualquier situación inesperada y brindarle sugerencias durante su estadía.
Solicite el masaje relajante en la pirámide bionergética, que se levanta en el corazón de la hostería. Adentro el silencio es absoluto. El suave sonido de la música instrumental, los aromas y elementos que se mezclan activan el sistema linfático y hace que la persona se relaje y disfrute. Luego puede pasar al restaurante para servirse platos deliciosos de la comida ecuatoriana como la cecina y el repe lojano, mariscos, seco de chivo y más. Todo es preparado con alimentos orgánicos y frescos.
Para hacer más larga su estancia, Hostería Paraíso invita a conocer Vilcabamba a través de diferentes actividades y tours: la visita a cascadas, cabalgar hacia el Cerro Mandango, conocer las experiencias de las fincas cafetaleras y de las moliendas de caña de azúcar o recorrer las parroquias aledañas para contemplar los hermosos paisajes.
En todas estas actividades vivirá experiencias que le dejarán sin aliento y quedarán grabadas en su memoria para siempre. Observará maravillas naturales impresionantes en la cordillera de Los Andes. El cuerpo le alertará que es absolutamente feliz. Para emprender cualquier excursión, asegúrese de dormir bien y disfrutar del desayudo nutritivo que le ofrece Hostería Paraíso.
PARA SABER
Tras la fama que ganó como El Valle de la Eterna Juventud, en Vilcabamba repuntó el turismo de salud y belleza. Casi todas las hosterías ofrecen servicios de spa y hay centros para la meditación.
Las cabañas son amplias, en algunos casos de dos pisos, perfecta para familias o grupos de amigos. Todas están rodeadas de jardines.
Ascender al Cerro Mandango toma tres horas caminando a paso normal, entre ida y retorno. Hay guías que acompañan el recorrido caminando. También puede hacerlo a caballo.