¿Alguna vez se ha preguntado cómo se produce una de las fibras más lujosas del mundo?. En #Yantzaza usted puede observar cómo pequeños insectos se convierten en gusanos y producen hilos de seda. Con ellos vivirá cada paso de esa mágica transformación. Esta es una experiencia vivencial profunda, conectada con el proceso artesanal y sentirá esa conexión con la naturaleza de forma relajante.

#Yantzaza es un pintoresco cantón ubicado en la provincia de Zamora Chinchipe, en el sur del Ecuador. Por su amplia biodiversidad y su riqueza cultural le conocen como “El Valle de las Luciérnagas”. En este lugar un gusano es protagonista de una actividad económica y cultural de gran relevancia; y representa una tradición que ha perdurado por años en la familia Morales.
Matilde Morales, una joven mujer, está al frente de este emprendimiento, en el barrio Quiringue. Cada espacio de su propiedad tiene que ver con la magia de la sericultura. Nos recibe una pileta desde donde, suspendido en la superficie, un gusano con la boca abierta deja caer un delicado chorro de agua hacia una piscina. Este es solo el principio de una experiencia sensorial única en la propiedad de Matilde.

A pocos pasos se cultiva media hectárea de morera, unas 4.000 plantas que son el alimento esencial de estos gusanos. Matilde cuida cada planta con esmero para asegurar una producción óptima del hilo. El verde de las plantas se complementa con el entorno del paisaje amazónico.
Casi colindante, en el galpón está la magia obrera de la sericultura. Allí está todo el proceso, que comienza con el delicado ciclo de vida del gusano de seda, una criatura que, en su etapa larval, se alimenta vorazmente de las hojas de morera. En su constante búsqueda por crecer, su cuerpo va cambiando, hasta que llega el momento crucial: la metamorfosis.

Cuando el gusano ha completado su labor, el capullo es cuidadosamente extraído para desvelar la seda en su forma más pura. Cada fibra al ser hilado y trabajado con esmero por Matilde, se transforma en un tejido suave y brillante, capaz de capturar la luz de la misma manera que un sueño al amanecer. Este proceso, lleno de paciencia y dedicación, conecta a la humanidad con la naturaleza de una forma tan profunda que cada hilo de seda parece contar una historia de esfuerzo, belleza y transformación

Fuera del galpón, ya en el taller, cada paso del proceso de sericultura, Matilde lo realiza con una absoluta dedicación minuciosa que convierte un simple capullo en una joya de la naturaleza. Tras ser extraído con cuidado, sumerge el capullo en agua caliente, donde se libera la fibra de seda que, con destreza y paciencia, se desenrolla en finos hilos. ¡Asombroso y espectacular!.

Este primer paso, que parece simple pero es esencial, marca el inicio de una transformación profunda. Los capullos se separan y se hilvanan, revelando una seda tan suave, mientras los hilos se entrelazan para crear una base perfecta para el siguiente paso, que es el tinturado. El taller de Matilde está impregnado de colores, con tonos que evocan la esencia misma del paisaje que los rodea.
Cada tinte natural, cuidadosamente aplicado, realza la luminosidad de la seda, creando una variedad de colores intensos y naturales que se fusionan de manera armoniosa. Este proceso preserva la tradición de la sericultura y pone en valor la conexión entre la naturaleza y el arte, creando piezas únicas, llenas de historia, color y textura.

Cada tinte natural, cuidadosamente aplicado, realza la luminosidad de la seda, creando una variedad de colores intensos y naturales que se fusionan de manera armoniosa. Este proceso preserva la tradición de la sericultura y pone en valor la conexión entre la naturaleza y el arte, creando piezas únicas, llenas de historia, color y textura.
Usted puede ser parte de esta experiencia sensorial y vivencial, y disfrutará de todo lo que conlleva la producción de seda. Serás testigo del momento en que los pequeños gusanos se convierten en capullos, envolviéndose en su propia seda. Cada hilo que producen es un testimonio del trabajo silencioso. Verá cómo esta fibra es extraída y transformada, en un proceso que combina paciencia, habilidad y sabiduría.
PARA SABER
El gusano de seda es un insecto cuya crianza y explotación se remonta a miles de años en Asia. En #Yantzaza, fue introducida hace varias décadas por Matilde Morales quien vio en la sericicultura (cría del gusano) una oportunidad para diversificar la producción.
Gracias al clima templado y la abundante vegetación de la zona, la familia de Matilde Morales se ha convertido en una de las principales productoras de la seda natural en este territorio.
La sericultura en Yantzaza es una actividad económica y una forma de arte. Los gusanos de seda se crían en condiciones controladas. La seda de Yantzaza es conocida por su suavidad, brillo y resistencia, lo que la hace muy apreciada tanto a nivel nacional como internacional.
Los hilos de este emprendimiento los vende y exporta fuera del país. Si visitas Yantzaza, también podrás disfrutar de una experiencia turística única. Aquí te dejamos algunas de las actividades y lugares recomendados para explorar: https://www.viajesvistalsur.com/Articulo/content/1232/detail/Yantzaza-Bosques--cuevas--cultura-y-tradiciones
Lleva ropa ligera y cómoda para disfrutar de caminatas en medio de la selva. Aplíquese repelente en los brazos y piernas para evitar la picadura de insectos. No olvides la cámara para capturar limágenes increibles.