Se trata de un encanto natural bañado por el río Isimanchi, con cascadas y lagunas que caracterizan a la parroquia San Andrés, del cantón Chinchipe, provincia de Zamora Chinchipe. La brisa de la flora y fauna es el primer encanto natural que recibe el turista que visita la parroquia San Andrés del cantón Chinchipe, considerado parte de la amazonía ecuatoriana.
Muestra de ello es la cascada, donde las rocas juegan un papel protagónico, y en cuya pared baja parece estar tallado un sombrero, que le da nombre al lugar. Encima asemeja a una superficie lunar, con orificios que acumulan agua cálida que invita a incrustarse descalzos, mientras se observa a uno que otro loro en los árboles de alerededor. Si le gusta la fotografìa, es el sitio ideal para prácticar, pues los parajes se prestan con sus tonalidades cambiantes según la ubicación del sol.
Similares bellezas naturales son la laguna del Golpeador, a una hora de la parroquia, viajando en transporte privado. La travesía comienza cuando termina la carretera y el turista debe caminar cerca de 20 minutos, atravesando el cerro hasta llegar a su destino. Desde ese momento existe una conexión perfecta con la naturaleza.
Otro de los encantos que resalta en San Andrés es la flora, con árboles maderables como: romerillo, cedro, guarapo, capulí, palo amarillo; sin dejar de lado a los árboles medicinales en los que están: valeriana, palo santo, laurel y chupalla, que son conocidos y utilizados por la gente propia del sitio.
PARA SABER
Para llegar a este lugar se puede tomar el transporte público de Zumba hasta San Andrés, en el turno de la mañana, a las 07h30, o en la tarde, a las 14:00, con un tiempo de dos horas, aproximadamente. El costo es de 2.50 dólares, con un recorrido cerca de los 18 kilómetros. Si viaja desde Loja hasta Zumba, existen 160 kilómetros.