Kasama se deriva del idioma nativo tsáfiqui Kasa : nuevo, y Ma: día, que traducido al español se lee “Un nuevo Día” o “Nuevo amanecer”. En la cultura Tsáchila simboliza el inicio del nuevo año. Siempre coincide con el Sábado de Gloria (para los católicos) y representa mucho más que para los occidentales la celebración del año nuevo.
No se conoce con precisión sobre la historia de esta tradición, pero se dice que la Kasama es un legado de los ancestros, que tiene más de 500 años. Cuenta con la historia que los antepasados realizaban la fiesta buscando prosperidad para las comunidades. Para eso, en la víspera hacían rituales de purificación y a la mañana siguiente se bañaban en el río.
También realizaban limpias, ingerían bebidas especiales y organizaban peleas entre familias. El último era el juego más esperado y la familia ganadora conseguía el respeto de la nacionalidad. El espacio era aprovechado para realizar el pedido de la mano de una joven. Un brote de fiebre amarilla hizo que por varios años la fiesta dejara de organizarse y perdiera fuerza, hasta que, en 1961, el gobernador, Abraham Calazacón la retomó para agradecer los dioses.
Así a finales de marzo la gran fiesta se vive en las comunas de Otongo, Mapaly y Peripa, en el kilómetro 7 de la vía hacia Quevedo, al sur de Santo Domingo de los Tsáchilas, también con la participación de otras comunidades como Chigüilpe, Poste, Búa, Cóngoma y Naranjos para reencontrarse con sus raíces, vivir momentos alegres e intercambiar sentimientos de prosperidad.
En este 2018, se alistan para el festejo entre los días 29, 30 y 31 de marzo, en la comuna Los Naranjos, a unos 40 minutos en carro desde el centro cantonal de Santo Domingo. Agustín Calazacón, dirigente de Chigüilpe, informó que se tienen previstos rituales, que incluyen baños de purificación y recibimiento ceremoniales para los visitantes. El inicio de la feria tradicional será el jueves 29, desarrollándose una serie de actividades, que incluyen algunas de corte religioso, por transcurrir en los mismos días la celebración de la Semana Mayor.
Los Tsáchilas, también conocidos como “Colorados” por el cabello rojizo que pintan y endurecen con una pasta de achiote, se alistan para la fiesta de música, danzas folklóricas, teatro, concursos en demostraciones de habilidades propias de la cultura como la caza y la pesca.
Cómo el evento ha tomado una connotación turística, se han hecho las adecuaciones necesarias para adecentar las vías que conducen a las comunidades y la logística para atender a los visitantes.
PARA SABER
- Para llegar, desde Quito a través de la ruta Aloag- Santo Domingo puede tomar un bus de las cooperativas Saracay, Zambrano. El tiempo de viaje es de tres horas.
- Desde Guayaquil el viaje toma cinco horas en bus. Entre las cooperativas que prestan los servicios de transporte están Transesmeraldas y Occidental.
- Los hombres y mujeres Tsáchilas suelen marcarse el cuerpo y el rostro, con simples de líneas negras con el tinte obtenido de una planta llamada huito, diseños que combinan con sus prendas textiles.