Uzhupud Garden está ubicada en la parroquia Chicán, cantón azuayo de Paute, a escasos 45 minutos de Cuenca. Tras un largo proceso de remodelación, ampliación y transformación, reabrió sus puertas al público.
Antiguamente este espacio fue una próspera hacienda familiar y hace unos 40 años se transformó en el proyecto turístico actual. Hace siete años hizo una pausa, se cerró al público y actualmente reapareció con novedades.
Más de 5 000 plantas, la mayoría orquídeas crecen por todos los espacios: en árboles, paredes, jardines, corredores, habitaciones, restaurante y salones. Sus extrañas formas, olores, tamaños y colores cautivan.
Al ingreso, tres llamativas piletas -que llueven hacia arriba- dan la bienvenida a los visitantes. Ese entorno está entretejido con ramas naturales y palmeras que tienen adheridas orquídeas, catleyas, güicundos y bambús enanos.
Es un ambiente de relax. La gente se detiene unos minutos para escuchar ese suave sonido del agua, el perfume de las flores y el sobrevuelo de los colibríes que llegan atraídos por las florecillas, dice Carlos Espinoza, gerente.
Es un placer caminar por los senderos que llevan hacia los dos salones de eventos: uno con capacidad para 120 personas y otro para 400. Pero es posible ocupar una planicie verde y acoger hasta 800 invitados.
Hay plantas sembradas dentro de cortezas de corcho, para mantener la humedad, y colocadas con tal precisión y armonía en los muros y paredes verticales. Es imposible no robarse la mirada de los visitantes.
Es como si todas las especies estuvieran en su propio hábitat. “Esto es una muestra de que podemos vivir en armonía”, dice Espinoza. El agua y las plantas transmiten energía y nos llenan de felicidad, comentó un jardinero.
Una especie de puente-pasacalle, lleva a la recepción de Uzhupud Garden y a las 68 habitaciones para hospedar hasta 200 personas en habitaciones múltiples. Los cómodos dormitorios, con grandes ventanales, permiten apreciar el paisaje.
El área del restaurante es amplia. En las mesas y el entorno también resaltan las coloridas y caprichosas orquídeas que se cultivan en este territorio. La carta está compuesta de comida nacional e internacional.
Aquí pueden servirse desde un ceviche, locro de papas y fritada, hasta ensalada de hongos portobellos con tomates deshidratados, salmón con salsa de puerro, filet mingon con queso azul y más.
La gente debe estar preparada para este encuentro vivencial con la naturaleza y su paladar. Desde las cómodas habitaciones, es un placer único levantarse al amanecer para observar el despertar de las aves y su vuelo entre los árboles.
Para saber
- Las habitaciones tienen ambientes muy elegantes. Hay habitaciones simples y dobles y los costos varían según los servicios.
- Parqueadero. Esta hostería tiene capacidad para estacionar unos 300 vehículos entre el parqueadero principal y otros espacios internos.
- Desde Quito o Guayaquil puede llegar a Cuenca vía terrestre o aérea. Hay varias empresas de buses y busetas que ofrecen los servicios de transporte y vuelos diarios.
- La hostería también dispone de una amplia y refrescante piscina y espacio para actividades deportivas en familia.